domingo, 6 de julio de 2008

Asomo de Futuro anticipado en su Juventud











Sabe que más adelante vendrán cosas nuevas, pero eso no le consuela en este instante, aún así se aferra a que probablemente encontrará motivaciones para hallar la chispa que despeje su añoranza futura.

Como una “individua” más en este terreno, se cubre de lodo para no aceptar que en algún momento habrá que parar o bajar notablemente el ritmo. Hoy sólo tiene un momento traicionero que se desborda por todo su cuerpo deteriorando una mañana sin sonrisas pero no por ello se invalida, sigue adelante, pasará, aunque llegará.

Desea desdibujar el tiempo con algunos paréntesis y volver a recorrer su juventud añadiendo un mundo de amigos y de alturas.

El espacio en años se escapa, no tan rápido como su subconsciente le propone, pero sus manos se arrugan más de lo que ya están, herencia que admite sin complejos e incluso con una sonora gracia; por lo menos sabe, que no cambiarán tanto cuando el bastón acompañe sus pasos.

Y las imágenes aparecen y desaparecen como en una proyección de power point, las fotos surgen…. sentada en la mecedora tipo abuela cosiendo a punto cruz, tomando las riendas del pincel abandonado, junto a las flores del jardín, recordando “al alemán” que por su edad quedó grabado en sus sienes rapelando en Tabares. Se repiten y brotan nuevos retratos atosigando la frente junto a sus ojos que intentan apartar esa tira de negativos que aparecen a todo color cruzándose alborotados; cierra los ojos y vuelve a su realidad deteniendo el segundero.

Aún soy joven, soy joven se dice, tal vez sólo de espíritu o de sensaciones o de mente, quizás no tanto de cuerpo, pero ha de sacar partido a toda su persona y esperar que sea mucho mucho más tarde cuando esas imágenes se traduzcan en vivencia cotidiana.

¿Quién escribe estas letras? desconoce quién moviliza sus dedos frente al teclado en este día bochornoso, triste…¿Dónde anda la mujer positiva que hoy se derrumba ante un reloj que ni siquiera lleva colgado a su cuerpo? Todo esto se traduce en un momento de angustia pasajero del que ella misma es consciente. Esta misma tarde o en la noche o mañana sabe que saldrá la alegría de vivir con los tropiezos rutinarios para seguir avanzando.

No hay más que vivir el momento con toda la fuerza que circula por las venas y aprovechar lo que tenemos sin crearnos necesidades añadidas, superfluas y absorber todo lo rico que nos trae este laberinto al que hay que saber encontrarle la salida (hay que mirar bien, a veces el letrero está muy alto).

Nada, un mal de horas, un ESCACHÓN a la vida.

Tortuga. Pensamientos del cajón con cerradura y sin llave.

2 comentarios:

Tortuga dijo...

Madre e hija se funden en la tinta y se mezclan en la pluma. Cajón con cerradura y sin llave, para poder revolver, reeleer, reescribir y soñar.
Un beso...

Chinita dijo...

No te haces a la idea de cómo entiendo y comprendo estas palabras...
Me ha encantado!!!!